Miguel Ángel Cotto (41-6, 33 KO) nació un 29 de octubre de 1980 en Rhode Island, Estados Unidos. Pero su familia se mudó a Puerto Rico enseguida cuando él tenía dos años. Se instalaron en Caguas. Entonces es puertorriqueño, o «boricua» como les gusta llamarse a ellos. Pero como en New York hay casi tantos de la comuna como en «La Isla del Encanto… En «La Gran Manzana» ha sido figura.
Miguel Cotto había arrancado a boxear a los 11 años. Carrera amateur estelar. Apareciendo en campeonatos mundiales y Juegos Olímpicos. Una figura muy querida y admirada. De un país de larga y rica tradición boxística. Y dejando un récord de 125-23 como aficionado. Es uno de los mejores y más logrados boxeadores de Puerto Rico de todos los tiempos. Ganando títulos mundiales en cuatro categorías diferentes. Durante 17 años como profesional. Guardia alta y gancho de izquierda: Receta para el desastre.
Cotto le gano al colombiano Ricardo Torres, quien tenía un muy buen jab. Le ganó a Malignani quien era rápido y le cayó con un tremendo estado físico. Le gano al inquebrantable Antonio Margarito. Un tipo de una fortaleza bruta, extrema. Totalmente esquivado por todos en su apogeo. Le gano a Randall Bailey que no quiso recibir más. A Shane Mosley quien fue otro fenómeno. A todos los atendía en su casa: El Madison Square Garden de New York. Ante una multitud.
Cotto era fuerte y bueno técnicamente. Muy bueno. Pero como pegaba se lo etiquetaba como un noqueador. Te doblaba las rodillas. Y si no caías, te mandaba a «otro planeta» mientras seguías dándole guerra. Golpes al cuerpo que te dejaban visco del dolor. Gancho al hígado… «El KO Invisible».
Cotto perdió su invicto contra Antonio «El Tornado de Tijuana» Margarito en el verano del 2008. En uno de los tantos clásicos entre México-Puerto Rico. Se recuperó y colecciono su tercer campeonato mundial. Pero se chocó con Manny Pacquiao en su apogeo. Se levantó dos veces de la lona y le dio pelea. Pero cayó en la última vuelta. Tiene victorias contra «Rocky Martínez, Maussa, Victoriano Sosa, Zab Judah, «El Matador» Mayorga… muchas eran «películas para el infarto». De una carga de adrenalina muy grande en la década del dos mil, la década milenaria. Les apuntaba al pecho y descargaba con toda su potencia. Que era muy respetable.
Subió a los Medianos Jr y, frente a 20.000 personas en el Yankee Stadium, noqueo a Yuri Foreman. Lo fue rompiendo al medio. Un tanque blindado de las divisiones del medio. Lo liquidó en el Round 9. Le gano a Margarito en la revancha, le dio gran esfuerzo a su derrota con Floyd «Dinero» Mayweather.
Y sorprende a todos siendo campeón mundial Mediano cuando tiro al argentino Sergio «Maravilla» Martínez tres veces en el primer Round y otra en el 9. El rincón de «Maravilla» tiro la toalla en el Round 10. Ese día nos dimos cuenta, y para siempre, que Sergio ya era solo la cáscara del fenómeno de boxeador que alguna vez fue. Qué tristeza fue ver caer al quilmeño, y perder el mítico título mundial mediano lineal. Pero pasaba a tremendas manos.
Fue el primer boricua en ser campeón en cuatro divisiones distintas. No el mejor. El mejor fue, para los más avezados, Wilfredo Gómez. Lo defendió con éxito una vez y luego perdió con Saul «El Canelo» Alvarez. Para él injustamente. Luego gana otro título decapitando a Yoshihiro «Kamikaze» Kamegai en Superwelter. Muchas batallas, siempre dando lo mejor. Fue un grande entre los más grandes.
Cotto hoy tiene cuatro hijos. Dueño de Promociones Miguel Cotto, y fundó Fundación Miguel El Ángel, que trabaja para prevenir la obesidad en los chicos. Juega al golf y cocina con sus amigos. Anda bien física, neurológica y espiritualmente. Completo. Siempre tuvo un aura, un halo. Era medio clavado que iba a seguir sobre el eje de la buena senda. Estaba medio que «en la tapa del diario». Es uno de los tantos casos con «final feliz». Pero, como no impresionan a nadie, muchas veces no son noticia.
Pero por suerte acá estamos haciendo tributo un poco a los sufridos boxeadores que siguen peleándola para que a sus familias y sus seres queridos no les falte nada. Y para que a la gente en general no les falte ejemplos y referentes.
FEDERICO «LOBO» MULLER