Remigio Saavedra, fue el quinto de los diez hermanos que tuvo la mama. Y devoto de su hermano mayor Cosme, quien era su referente, su ídolo, y siempre supo que iba a seguir sus pasos, o al menos «darle el intento». Cosme fue uno de los mas grandes de la historia, compitió en mundiales y en juegos olímpicos. También esta instalado en «la galería de los mejores». Pero adentrémoslos en Remigio…
Martín Remigio Saavedra nació el 1° de octubre de 1911 en Godoy Cruz, Mendoza. Su familia padecía carencias económicas, por lo que desde temprana edad trabajó para colaborar con su hogar. Fue lustrabotas, canillita y comercializó carbonilla para los herreros. Comenzó a andar en bicicleta desde joven y ganó su primera carrera a los 14 años.
Al año siguiente «descollaba» en todos lados. Junto a su hermano se mudó a Buenos Aires, donde continuó entrenando. En 1928 participó de la Doble San Isidro en tercera categoría. En menos de tres meses, logró ascender a la primera categoría, luego de una racha imbatible.
Ganó la Doble Cañuelas, la Buenos Aires-Mar del Plata, la Doble Chivilcoy, la Buenos Aires-Rosario, y es ganador de la Rosario-Santa Fe. Ganó más de 300 carreras, 100 en rutas, y 200 en pistas. Remigio fue ídolo de multitudes en los años 30. Nació con «El Gráfico», la mejor revista de habla hispana de la historia. Que lo siguió y mucho. Uno de los ídolos populares de la década. Sonrisa taquillera, afectuosa, y tipo entrador. Había que pedalear, ganar, y también gustar.
Concursó en el campeonato mundial, pero se vio obligado a abandonar debido a una falla mecánica de su bicicleta. En 1938 compitió en 6 Carreras de los Seis Días, en Estados Unidos y Canadá. Asimismo, formó parte de la carrera de los Seis Días del Luna Park.
Su capacidad para mantenerse competitivo a lo largo de los años, y la manera en que superaba obstáculos tanto físicos como emocionales, lo convirtieron en un verdadero ícono del deporte en el país.
La gran hazaña de Remigio Saavedra
Este ciclista consiguió realizar dos veces uno de los hitos más importantes de este deporte, que constaba en un recorrido de más de 1100 kilómetros. Se trata de un trayecto entre Mendoza y Buenos Aires, que cruzó por primera vez el 13 de noviembre de 1943. Remigio alcanzó esta meta en un tiempo de 17 horas, 55 minutos y tres segundos. Utilizó la asistencia de un auto, el cual se posicionó en frente de su rodado, con el objetivo de frenar el impacto del viento.
Su bicicleta fue producida por la fábrica “Cometa” especialmente para esta ocasión. Su creación permitia recorrer casi 20 metros con una sola pedaleada. Durante esta jornada, casi no se detuvo, por lo que pudo alcanzar un tiempo récord al arribar a la provincia.
El 5 de diciembre de 1981, a los 70 años, volvió a repetir esta hazaña. A pesar de encontrarse retirado de su actividad profesional, este hecho logró una gran masividad y recepción del público, debido a la edad del ciclista. Uno de los principales objetivos de este hito era concientizar a las personas acerca de los graves peligros del tabaquismo. Saavedra partió del Automóvil Club Argentino (ACA), en Mendoza Capital, y arribó al Velódromo Municipal de Palermo, de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, luego de 18 horas y 45 minutos, con la compañía de un automóvil en su ruta. Su llegada fue a las 10 de la noche, frente a una gran multitud que se había reunido para recibirlo.
Su «estrella» seguía tan prendida y brillante como siempre. Se burlo de su reloj biológico, de los de arena, y hasta de los modernos garmin. Los «detono» a todos. En homenaje a Remigio Saavedra y a esa demostración de determinación, vigencia, y amor por el deporte… El 5 de diciembre fue declarado el Día del Ciclista Argentino. La efeméride celebra también al deporte en sí y busca incentivar a las personas a acercarse a las bicicletas.
Una fecha dedicada a reconocer el esfuerzo, la dedicación y la pasión de quienes eligen la bicicleta como medio de transporte o deporte. Este día es un homenaje a los ciclistas profesionales y a todas las personas que disfrutan del ciclismo en su día a día, ya sea para moverse por la ciudad, hacer ejercicio o como parte de un estilo de vida saludable y ecológico.
Además Saavedra es recordado también cada 29 de mayo, con el Día del Bicicletero, fecha impulsada por el Centro Promocional de la Bicicleta en 1982. Remigio falleció el 5 de julio de 1998 a los 86 años. Pero «revive» todos los 5 de diciembre cuando lo recuerdan y homenajean. Por obligación y por admiración.
FEDERICO MULLER