Erica «La Pantera» Farías se llevo la pelea denominada «Una Cuestión de Honor», dominando a Ana «La Monita» Esteche al cabo de 10 rounds, por decisión unánime en una pelea muy disputada y pareja. ¡Con un calor extenuante!
«La Pantera» Farías , campeona mundial Super Ligeros del C.M.B. le ganó a «La Monita» Esteche, campeona mundial Super Ligeros de la A.M.B., F.I.B. y O.M.B. en el gimnasio Juan de Dios Obregón, del Club Ferrocarril de Concordia, Entre Ríos, republica Argentina.
Con esta victoria Farías elevó su record a 25-2, 10 KO, mientras que Esteche se bajó del ring con una estadística de 14-4-5, 2 KO. Pero las dos estuvieron a la altura de las expectativas.
Farías calentó la previa, fue metiéndose bajo la piel de su rival, ganaba en los micrófonos y antes de que empiece la guerra se la percibió con más concentración, y obsesión por su rival. ¡Tenía que cumplir con lo prometido!
«La Pantera» arranca con confianza, mas rápida y certera, y en «la primera de cambio» una derecha a la punta de la pera de «La Monita» la hace caer a la lona y la obliga a boxear en retroceso, algo que no es lo que más le gusta hacer.
En todos los primeros rounds Farias toca y sale, gira hacia los laterales, siempre ganando en los anticipos, dejando a Esteche pegándole al aire y sintiéndose frustrada.
En el cuarto se emparejó algo, con la mejor mano de la noche de Esteche, quien encontró entrando a su confiada rival y ahí empezó a poder entrar en su ritmo, calentó el cuerpo, castigando por todos lados, siendo optimista a pesar de tener una rival movediza, versátil, que también agarró y mucho, y muy inteligente (solo se prendió en los cruces cuando la situación la obligaba).
En las vueltas 5 y 6, Esteche empieza a agobiar, a imponer su fortaleza, un verdadero tanque determinado a aplastar, y parece como por estar dando vuelta la pelea, pero no le dio «la nafta».Hay que decir que fue una noche híper calurosa y húmeda. El estado físico fue supremo por parte de las dos, pero son seres humanos…
En los rounds de campeonato, cuando parecía que «La Pantera» estaba cansada, volvió a pensar en frio, dio un paso atrás, puso la pelea «en la nevera» y combino inteligencia, experiencia y otro poco más de agarre.
«La Monita» arrancó muy tarde la pelea, y al final tuvo que perseguir compulsivamente a Farías, en busca de «la mano milagrosa» que nunca llego.
La pelea fue muy pareja, una revancha generaría aún mucha más expectativas, como la muy buena trilogía entre Celeste «La Bestia» Peralta y Ana «La Monita» Esteche.
La tarjetas de los tres jurados fueron justas (valga la redundancia).
En la primer pelea de la noche, la concordiense Yanina Lezcano (1-0, 0 KO) debutó finalmente como profesional en la Categoría Ligeros (60 kilos), contra la brasileña Amanda López (3-3, 0 KO) ante sus amigos y familia, que fueron a apoyarla en un importante numero.
Yanina pudo trasladar al campo rentado toda su habilidad, talento y velocidad, que la hicieron muy prestigiosa en la «tierra de aficionadas».
Tuvo una rival fuerte, aguerrida, musculosa, que tiraba con potencia y que supo conectarla en la corta distancia a pleno, pero aguantó y muy bien la pera de la entrerriana, además recibió con mucha frecuencia. La oriunda de Uruguayana terminó cayendo holgadamente en las tarjetas.
Lezcano sumo «por la vía interna» con un jab rápido y una derecha larga y muy incomoda para una rival, que no supo resolver ese 1-2, que es un clásico en aquellos boxeadores espigados y de gran alcance de brazos. Yanina es una gran esperanza en nuestra ciudad, que dicho sea de paso esta en épocas «de vacas flacas» a nivel argentino y profesional…
Posteriormente se subió en categoría Welter (66, 500 gr), el también concordiense Jonathan «Tin Tin» Ruiz (2-1, 2 KO), quien tuvo un año lleno de desafíos, ganó en su debut por KO 1, en aquella noche de enero en el Corsodromo de Concordia (previa de Vittori y Puñalef), que perdió la segunda por KO y que se recuperó en la tercera este viernes, también por KO 2, ante el también brasileño Rafael Rosa Dos Santos (0-8, 0 KO).
Ruiz muestra un cuerpo tallado a mano, siempre bien preparado, tiene velocidad, potencia y explosividad. Fue terrible el castigó que fue depositando en la cabeza y en el cuerpo del «Garoto».
Lo tiró en el primero, en el segundo también dejo al «muñeco en la lona», demostrando un ataque preciso y vicioso, muy bien parada la pelea por el arbitro Beñez. Ya la suerte estaba echada!
¡Cuando el oponente no reacciona y no atina a contragolpear, nos vemos en el corso! ¿Cómo se dice en portugués «le prendieron el zamba»?
LA LEY DEL BOXEO